
Elizabeth tiene 37 años, esta casada y aburrida. Hace dos meses descubrió un turbio placer al

No es un baile sensual ni un vulgar streaptease. Es una hoja al viento. Es una mujer que baila suavemente y unos ojos que la miran.
Todo empezó un día en que Elizabeth estaba a punto de entrar a la ducha. Empez6 a llover a mares y ella salio corriendo a cerrar las ventanas del balcón. Entonces lo vio. Un chico de cabello muy negro y cara muy blanca, sentado en una silla, con las ventanas abiertas, sintiendo como salpicaba la lluvia sobre su piel. Ella miro sus ojos y sintió como su cuerpo semi desnudo se convertía en el infinito de esos ojos
AI día siguiente el estuvo allí y el que le siguió y todos los días que vinieron. Y ella empezó a escuchar Ella Fitzgerald todas las tardes y a quitarse el exceso de ropa poco a poco. A la semana había empezado a bailar para sus ojos y no ha parada desde entonces.
Adrián tiene 24 años, el cabello muy negro y la cara muy blanca. Todas las tardes de su vida, su madre lo ayuda a llegar al balcón donde trata de imaginarse una ciudad que sus ojos muertos no han podido ver nunca. Se sienta en su silla y escucha. A veces deja que la lluvia lo salpique para sentirse un poco mas vivo. Desde hace mas o menos dos meses, alguien pone un disco de Ella Fitzgerald y el siente un calor -casi sexual-.en el cuerpo que no sabe explicar. Y el sigue imaginando lo que habrá mas allá del negro infinito que hay dentro de sus ojos.
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