Apretar, ver el brillo de los ojos desaparecer, sentir el poder, sentirse Dios, su respirar, desaparece poco a poco, adrenalina le dicen, pero es como un orgasmo múltiple, sentir como muere una persona, observar como su cuerpo, de la lucha inclemente pasa a la paz sepulcral, apretar fuerte, muy fuerte, hasta lograr escuchar el chasquido de la muerte al romper los huesos, y ver como la mirada de un brillo de terror, pasa a la ausencia total de el.
Se dice que se nace con el Gen del asesino, creo que es verdad, a veces eso me preocupa, pero no tanto. Desde pequeño he pasado desapercibido, ser invisible te hace poderoso, te hacer ser aceptado, hasta dar lastima es una forma de poder, quien ve al chofer de un autobús, al vagabundo de la esquina, a la señora del hospital que limpia, al vendedor ambulante, por eso ve el mundo que te rodea, a la mitad lo desapareces y solo los ves segundos, cuando necesitas algo, haz un ejercicio practico dime ¿como vestía el chofer del bus que tomaste hoy o como estaba vestida la dependiente del sitio donde compraste algo?. Ni recuerdas a la mitad de las personas que vistes hoy, pero yo si, todos son victimas en potencia, presas que deben ser cazadas, victimas de mi sed de sangre.
¿Como empecé con este juego de ser criminal?, fue casual, no soy victima de un trauma, ni de padres golpeadores, solo mi Gen asesino, ese pequeño cambio de mi A.D.N que me hace un ser diferente, que disfruta de ver morir a otras personas, y que me distingue de esos seré inferiores y serviles que inundan el planeta y se vuelven mis presas. Desde muy pequeño envidie todo y a todos, sentimiento normal de seres superiores, desear y desechar, mi hermano pequeño era la atracción del planeta y yo a su nacimiento fui relegado del mundo, ser miserable ,que me quito mis pertenencias, y al que debía amar y cuidar, ¿con que derecho entro a mi mundo y lo cambio?.
Esa tarde estaba en brazos de mi madre, riendo y cantando, cuando llego, ¡mi hermanito¡¡ y gateando tropezó, mi madre salió corriendo ,olvidándome por completo, dejándome solo en medio de ¡la nada! desde ese día planifique deshacerme de él, lo cuide con esmero, le ame, le di mimos, alegrías. Hasta conseguir el día y sitio oportuno. Después de semanas llego el día, mi madre dormía con el engendro, mientras yo estaba jugando en el patio, no había nadie mas en casa, cuando de repente escucho unos pasos inciertos y volteo, allí estaba el, solo para mi, busque a mi alrededor para ver si alguien me veía, pues nadie se escuchaba ni veía, lo llame, y saque un caramelo de mis bolsillos, el sonido lo atrajo pasito a paso, hasta que la reja del balcón nos separaba, acerco su carita y la metió entre las rejas se asusto, quiso gritar, tape su boca y torcí su cuello hasta sentir el crujir de nueces, me asuste al ver el hilillo de sangre rodar por su boca, me asuste, lo acomode, corrí a mi cuarto y me acosté a dormir, desperté con los gritos y alborotos de la casa, mi madre llorando, mi padre ,también, y todos explicándome ,que mi hermanito murió en un accidente en el balcón, llore se mucho de placer y de triunfo, así comenzó con mis pequeños y audaces crímenes….. Continuara.
JENNYFER.
